A cargo de Cristina Casabó y Pablo Thiago Rocca

El empleo abigarrado
de desechos de azulejos ha sido la constante en la creación de los artistas autodidactas
de todo el mundo, llegando a obras edilicias de gran porte, como las Torres de
Wats de Simon Rodia (1875-1965) en Los Angeles (USA), el Parque de las Rocas de
Niki de Saint Phalle (1930-2002) en Garavicchio (Italia), y la Casa Picassiette
de Raymond Isidoro (1904-1964) en Chartres (Francia). El caso de Betty
Galán, acaso más modesto y reducido en propósito pero igual de impetuoso en
número, es de otra naturaleza, distinto y distante de la labor de artistas
autodidactas famosos, y si se lo observa sin prejuicios, se encontrarán
secretas conexiones con algunas de las principales vanguardias modernas del
siglo XX, como las que cultivaron los constructivistas y los neoplasticistas.
Un concepto
elevado del orden dicta las composiciones de Galán, movidas por un sentido del
color tan espontáneo como efectivo. Básicamente, para sus bancos trabaja en una
forma triangular a la que otorga un ritmo sostenido, pero variando los colores,
dimensiones y la inclinación de los azulejos, siempre lisos y de color neto (sin
dibujos). Rombos, rectángulos y cuadrados completan las figuras
utilizadas.
Con esa frugalidad de recursos, de una
economía y una idealidad que se diría pitagórica, Galán compone su universo
creativo..." (Fragmento del texto "Betty Galán. Simplicidad y precisión en el arte mosaico" de Pablo Thiago Rocca)
Bancos Azulejados (2012)
Textos de Cristina Casabó, Pablo Lecor, Alvaro Lacoste, José Pablo Arenas y Pablo Thiago Rocca. / Fotografás: Cristina Casabó / Traducción al inglés: Inés Trabal. / Traducción al alemán: Dieter Schönebohm / Traducción al italiano: Elena Pucci / Maqueta, diseño e impresión: Monocromo / ISBN 978 9974 98 6251
Viernes 17 de agosto de 2012 a las 19 horas en la Sala Manuel Benavente del Museo de San José (calle Treinta y Tres esquina Bengoa, San José).