EXPOSICION DE CABRERITA EN PARIS

 
Vous êtes cordialement invité au vernissage de l'exposition
le jeudi 19 mai à partir de 18h

JAVIEL RAUL CABRERA 
(1919-1992)
aquarelles et dessins
du 19 mai au 4 juin 2011
GALERIE 18 
18 rue de Jouy
75004 PARIS
métro : Saint-Paul
Bus : 76
La galerie sera ouverte tous les jours 
de 14h à 19 h
Tel : (0033) 06 26 49 46 72

Montevideo fue testigo de la primera exposición de acuarelas de Javiel 

Raúl Cabrera, en 1944, bajo los auspicios de Parrilla. La figura central, clave de 

su obra, fue la Niña de P., estado del ser en la abstracción. 

María Esther Gilio ne so equivocó cuando escribió : « En definitiva, la pintura 

de Cabrera es el mundo de la poesía de Parrilla, traducido en línea y color. » 

Torrés-García vio sin duda « al pintor » en el muchacho de 20 años. 

Cabrera pasará más de 30 años en un hospital psiquiátrico… Borrando el horror 

del error de un internamiento abusivo, la ciudad de Santa Lucía rindió en 1993 

un homenaje póstumo al pintor maldito. 

Cabrera entrará en la leyenda y su obra en el mercado del arte. 

Cabrera falleció en 1992. 

Que viva su obra. 

Llega el día y la hora en que Uruguay y el mundo tomarán conciencia de la uni- 

versal dimensión de los dos gigantes hermanos en arte : Parrilla el poeta amante 

de Sabiduría, Cabrera el pintor de l’innocence recouvrée. 

QUE VIVA SU OBRA. 


FERNANDE DALÉZIO


Agradecemos la información a Magali Stage. Imagen: Dossier de prensa. Colección Esterisme

ANTOLIN REGRESA

“Yo quiero que la gente sea feliz mirando mi obra. Es una forma de ayudar a las personas.”



Actuación de Antolín en La Pasionaria (Reconquista 587, Montevideo) Sábado 7 y 14 de mayo.

"La plurifacética obra de Manuel Núñez, mejor conocido como Antolín (Montevideo, 1956)  posee algunos rasgos que la tornan inconfundible: es francamente positiva, inesperadamente jocosa y con elementos que sugieren ternura y fragilidad emocional. Antolín aspira a una expresión global que abarque todas las manifestaciones artísticas y no ha parado de experimentar en sus búsquedas estéticas desde los diez años (...)  En la efervescencia cultural que prosiguió a la reapertura democrática de los años 80, Antolín irrumpió con un nuevo ritmo musical que él denominó “pos Anto¨ y definió como “el contraste de ritmos entrecortados”. Cierta espontaneidad en el manejo de la actitud corporal y de la voz, y letras más o menos absurdas y repetitivas, despertaron la imaginación incrédula del público y el interés de músicos como Gonzalo Gravina, Urbano Moraes y Gabriel Casacuberta, que lo acompañaron en sus actuaciones (...)


Extraído de Otro Arte en Uruguay (Linardi & Risso, Montevideo, 2009)